Ermita de Salas
UN POCO DE SU HISTORIA DE ESTE CENTRO DE PEREGRINACIÓN QUE ALFONSO X El Sabio, COMPARÓ CON ROMA, JERUSALÉN Y COMPOSTELA.
Salas surgió hacia 1203 gracias al apoyo de la reina Sancha, fundadora también del monasterio de Sijena, y del obispo de Huesca García de Gudal. Y muy pronto se difundieron los milagros de su Virgen y comenzaron a llegar los primeros peregrinos.
Jaime I otorgó 3 privilegios en favor del santuario y en 1251 su esposa, la reina Violante de Hungría, hizo testamento en Salas.
El santuario y su Virgen se llaman "de Salas" porque era el nombre del término en que se construyo la iglesia. Está ubicado a poca distancia de la ciudad, junto al río Isuela.
Su iglesia es poco común, con cabecera plana y planta rectangular, con unas dimensiones de 34 x 16 metros. Su sorprendente interior desapareció con la reforma del siglo XVIII. En su lado norte se levanta una pequeña torre-campanario. Las principales fuentes de luz, además de estrechos ventanales en los muros, eran el grandioso óculo de la fachada y un vano cuadrangular en la cabecera. La portada esta formada por seis arquivoltas semicirculares con decoración geométrica, vegetal y de puntas de diamante, con similares en otros monumentos del siglo XIII de la Corona de Aragón (San Miguel de Foces, Catedral de Lérida, Valencia,..)
En el siglo XVI se construyó una hospedería, de la que se conserva un pórtico de piedra en el lado norte.
Durante la guerra civil, Huesca fue cercada por los republicanos desde agosto de 1936 a marzo de 1938. En esta época Salas fue posición avanzada de la defensa de la ciudad. En el templo estuvo acuartelada la Legión Gallega, unidad de voluntarios falangistas. En su cabecera son visibles los impactos de las bombas republicanas. En este sector combatió en 1937 George Orwell.