Como ampliación de un caché cercano, y como continuación de éste (aconsejo leer y buscar primero el otro), este caché pretende reforzar la visita al pequeño pueblo de Mioma, un espléndido y tranquilo rincón rodeado de naturaleza. El caché nos llevará a descubrir el pequeño cementerio de la localidad.
Este cementerio, al igual que lo que ocurre en la Iglesia y la fuente que veíamos en el primer caché, también está construido con algunos grandes bloques de piedra que los lugareños comentan provienen de la antigua localización del pueblo, a mayor altitud y de origen muy antiguo.
Os invito a recorrer sus montañas y descubrir su variada y rica naturaleza y que disfrutéis de la tranquilidad de la zona.
El caché: es una tartera de tamaño pequeño que permite el intercambio de objetos. Dentro he dejado algunas de los "frutos" de la naturaleza que se pueden encontrar en la zona, una muestra muy pequeña de toda la rica y variada biodiversidad que nos rodea y que muchas veces nos pasa desapercibida por no tener tiempo para observarlo. Os animo a observarestos objetos con cariño. Dejadlo todo tal y como lo encontréis para que el caché dure sin ser espoliado mucho tiempo.